Rescate sí, rescate no.

Nuestro Marianico se encuentra el pobrecico (es que no da para más) en la encrucijada de pedir el rescate o no. Hasta ahora se encuentra en el camino intermedio, en la solución ideal, en la cuadratura del circulo, a lo que él aspira (sin mover un dedo, ni alterarse) y a lo que su oronda amiga Merkel se opone: que el BCE nos compre la deuda siempre que queramos (vamos, que nos rescate igualmente), pero pagando muy pocos intereses y sin más compromisos ni condiciones.

Pero dejemos de soñar, el BCE ha dicho que si queremos que nos compren deuda, que se solicite la ayuda (rescate) con todas las consecuencias, buenas y malas.

Si se solicita, se acabaron las especulaciones sobre primas de riesgo, tipos de interés, etc, todo se regirá por un memorando con condiciones, plazos, etc. Así, tendremos la financiación exterior asegurada a un tipo de interés fijo (y más bajo). Por supuesto, como contrapartida, la intervención "de facto" de nuestra economía por la U.E., cesión total de la soberanía económica, y ante todo y sobre todo, la exigencia de más recortes,  más ajustes,  más austeridad,  más hachazos y menos estado del bienestar (si es que a estas alturas queda algo). Y esto por muchos años.

Si no se solicita, seguirán los especuladores jugando con la prima de riesgo (al alza, por supuesto), machacándonos con los tipos de interés, y con la dificultad añadida de quedarnos sin financiación externa (nos guste o no, dependemos de ella), pero además con las mismas consecuencias para la ciudadanía que el rescate.

Mi opinión, solicitar el rescate, pero con una gran salvedad: cambio de las políticas económicas, por tanto, cambio de gobierno: Un gobierno que solicite el rescate, pero no para salvar bancos inviables y ruinosos o invertir en casinos y parques temáticos. Que utilice el dinero del rescate en fomentar y favorecer la actividad económica, en crear un tejido industrial y empresarial productivo no especulativo, en invertir en investigación, desarrollo e innovación (energías renovables, farmacéutica, salud, medicinas, tecnología, etc) en fortalecer el sector publico (no derrochar, sí optimizar y hacerlo  más eficaz y eficiente), en educación, formación profesional y universitaria públicas y de alta calidad (es el futuro).

Todo esto, acompañado además de un cambio radical en la política fiscal: dejemos de subvencionar religiones varias, dejemos de perdonar a los estafadores y delincuentes financieros y luchemos contra el fraude, hagamos que los que  más tienen paguen  más, hagamos que la especulación financiera y los beneficios asociados paguen una tasa, hagamos desaparecer los paraísos fiscales, ¡justo lo contrario de lo que están haciendo!.

Claro, nada de esto se hace de un día para otro, ni genera pingües beneficios inmediatamente. Es una carrera de fondo, es una inversión a medio/largo plazo que, a buen seguro, será el pilar fundamental de un cambio necesario y radical y que nos ofrecerá un futuro mucho mejor que el que tenemos ahora.

Utopía.

Vino Merkel ¿y que?.

Vino la Merkel, y se fue. Lástima que no se llevase para no volver a Marianico y su equipo, hubiera sido la verdadera solución para la crisis.

La política de nuestro Marianico es NINGUNA; no tiene planes de futuro, no tiene un modelo productivo nuevo, no tiene soluciones, no tiene nada de nada; solo se limita a dejarse llevar y esperar que otros (la malvada de la Merkel y el BCE) nos solucionen los problemas. Olvida (olvidamos) quizá a propósito, recordarnos que los rescates, la compra de deuda, etc., hay que devolverla y además con intereses, y previamente hay que machacar a la población con condiciones leoninas. El marrón será para el que venga detrás. Pero esto no se dice.

De puertas para adentro, nada nuevo. Aplicar su ideología ultraconservadora: deteriorar hasta el extremo lo publico para excusar su privatización, retrocesos en derechos sociales y laborales, aborto, patriotismo en forma de toros, catolicismo y bandera española,... Y algo tan fácil como gastar cada vez menos (ellos le llaman ajustes, optimización, eficiencia,... yo lo llamo hachazos sociales) e ingresar por la vía fácil, subiendo el IVA que pagamos todos por igual, sea cual sea nuestro poder adquisitivo. Del super-IVA sobre artículos de lujo ¡ni hablar!, de reducir o eliminar subvenciones eclesiásticas ¡para nada!, del impuesto sobre patrimonio-grandes fortunas ¡bah!, de un IRPF mas justo y equitativo ¿que me dices?, del impuesto sobre beneficios a la banca y/o transacciones financieras, ¡uf!, etc., etc.,

Saldremos de esta, seguro, pero a costa de ser el chiringuito playero de Europa, el gran casino para blanquear dinero, el gran centro de operaciones de las mafias (napolitanas, rusas, españolas, da igual), el gran prostíbulo multicultural. Aquí solo quedaremos camareros, putas, gangsteres y políticos (ah! y curas, muchos curas). Los investigadores, científicos y demás personal formado y cualificado se nos irá fuera; en una sociedad medieval no queda espacio para la inteligencia.

Las estadísticas macroeconómicas dirán que hemos salido de la crisis, las microeconómicas dirán que la población está cada vez mas empobrecida en nivel y calidad de vida-renta y con mínimos-nulos derechos sociales y laborales.

Pero de momento todos contentos: nos van a prestar mucho dinero (a devolver con intereses) y traen Eurovegas a Madrid. ¡Ah!, y vuelven los toros a TVE y la liga. 

Tranquilo majete en tu sillón.

El Banco Malo Público (BMP); la gran estafa a l@s español@s.

Se materializa la gran estafa a los españoles:

Tras todos los hachazos (en todos los medios dicen "ajustes"), subidas de impuestos, copagos, bajadas de derechos sociales y laborales, eliminacion de todo lo publico, etc.....  nos llega la creación del gran Banco Malo (que yo pensaba que era Bankia, pero NO). Medidas impuestos por la gran Unión "económica, debemos recordar" Europea para hacer efectivo el "rescate" (que todos los medios dicen "ayuda blanda" o "inyección guay sin compromisos"). Este "rescate" se va a dedicar a crear el Banco Malo Publico (BMP); creado para comprarle a la banca los pisitos y solares que no consiguen vender (todos los medios dicen "activos tóxicos"). Una vez realizada la compra por el Estado (nosotr@s), volveremos, sin duda, al inicio de otra gran burbuja inmobiliaria: los bancos se quitan de encima toda la mierda y ademas se harán de una gran liquidez (nuestro dinero) que de nuevo volverán a invertir en ladrillo, para volver a inflar otra burbuja, para que de nuevo estalle y para que de nuevo papá Estado les vuelva a comprar los pisitos: y así, vuelta al ciclo. Total, nadie les pedirá responsabilidades por sus actuaciones.

Lo peor de todo, es que este "rescate" nos hipoteca el futuro a tod@s y l@s que vengan detrás: desmantelamiento del sector publico total (educación, sanidad, etc.,) y por tanto privatización del mismo, esclavitud laboral, impuestos altísimos injustos, copagos, repagos, etc.,

Y lo peor de lo peor es la casi "complicidad", en forma de silencio, o abstención, o inacción, de casi toda la oposición. Y esto provoca un gran desencanto (por no decir indiferencia, sumisión, decepción, desilusión, etc.) y por tanto una falta absoluta de liderazgo en otr@ lider que nos ilusione para un futuro cambio. No hay alternativa, de momento.